sábado, 13 de diciembre de 2014

Uñas perfectas

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Si usas esmalte con frecuencia y, por tanto, mucho quitaesmalte, es posible que tus uñas se vuelvan frágiles y quebradizas. La mayoría de quitaesmaltes contienen acetona y este elemento las deshidrata y reseca. Es preferible buscar una solución sin acetona, para mantener uñas fuertes.
• Ponte guantes al realizar quehaceres del hogar, sobre todo, al utilizar detergentes, ya que su fórmula cuenta con químicos dañinos para las uñas y la piel. Además, al limpiar el polvo, usa guantes de tela.
• Al realizar actividades en el jardín en las que no sea conveniente usar guantes, es recomendable colocarse una capa de crema para las manos y un poco de jabón bajo las uñas antes de empezar, de esta forma se evitará que queden partículas de tierra difíciles de sacar.
• La mejor forma de aplicarse crema para las manos es frotar la loción suavemente por cada dedo. En la palma y el dorso de la mano, se la coloca con movimientos circulares con el pulgar y las yemas de los otros dedos. Si las uñas están resecas o tienen escamas, hidrátalas con crema hidratante cada vez que te la coloques en las manos o en el rostro. Procura tener un frasco de crema junto al lavabo para usarla después de lavarte las manos.
• Para retirar las células muertas y estimular la regeneración celular, utiliza un exfoliante suave. Este es un perfecto paso previo a la rutina básica de cuidado de las uñas. Después de usarlo, aplica una crema hidratante.
• Para eliminar manchas de los dedos, como aquellas causadas por la nicotina, frota la piel con una rodaja de limón. De igual forma, si empiezan a aparecer máculas de envejecimiento, es recomendable sumergir las manos una vez por semana en zumo de limón con aceite.
• Los esmaltes oscuros pueden manchar las uñas; es necesario aplicar una base bajo ese esmalte para evitar que queden marcas. Si te ha quedado alguna mancha, es mejor dejar que se vaya sola. Existen blanqueadores, pero estos contienen peróxido de hidrógeno que tiene un efecto excesivamente desecante.
• Al retirar el esmalte, humedece el algodón con quitaesmalte y pásalo por la uña presionando firmemente durante unos segundos antes de frotar. Es preferible usar una bolita de algodón por cada uña, para evitar que la pintura se riegue por los dedos. Si utilizas quitaesmalte con acetona, después de aplicarlo, coloca un poco de aceite para cutículas.
• Por último recuerda que por más que cuides tus uñas, estas se estropearán si abusas de ellas. ¡Las uñas no son herramientas!, no las uses para quitar etiquetas o para retirar tapas con fuerza.

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